Nota de transcripción
p. i
BIBLIOTECA CLÁSICA
TOMO XLII
COMEDIAS
DE
ARISTÓFANES
TRADUCIDAS DIRECTAMENTE DEL GRIEGO
POR
D. FEDERICO BARÁIBAR Y ZUMÁRRAGA
TOMO III.
MADRID
LUIS NAVARRO, EDITOR
COLEGIATA, NÚM. 6
—
1881
p. 1
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Ya en Los Acarnienses habíase burlado ingeniosamenteAristófanes de las innovaciones dramáticas de Eurípides, criticando elfalso patético que trataba de obtener presentando a sus héroes cojos oreducidos a la mendicidad. En Las fiestas de Ceres y en LasRanas le veremos nuevamente encarnizarse con su enemigo, sacando aluz todos sus defectos y dando la voz de alerta a sus contemporáneossobre las peligrosas teorías artísticas y morales que en sus tragediasabundaban. No puede desconocerse, pues de otro modo no se comprenderíala virulencia y ensañamiento con que Aristófanes le ataca, que entreambos poetas debía de haber motivos de resentimiento personal; pero haytambién que hacer justicia a la buena fe de nuestro poeta, y confesarque cuando sus censuras se limitan al sistema dramático y moral deEurípides,p. 4 no deja por locomún de tener razón. Dejando para el preliminar de Las Ranasel estudio de los defectos literarios del émulo de Sófocles y Esquilo,nos limitaremos a decir aquí que, en Las fiestas de Ceres,Aristófanes ataca principalmente a Eurípides bajo el punto de vista desu célebre misoginia o aborrecimiento de la mujer.
Aunque no faltan autores que sinceran a Eurípides de este cargo,explicando sus injurias al sexo bello por la situación de lospersonajes, y contraponiendo a sus Medeas, Fedras y Estenebeas, lasIfigenias y Alcestes, tipos acabados de candor y sacrificio conyugal;lo cierto es que hasta la tradición, apoyada sin duda en datos deverdad, viene a corroborar la fama de misóg