.
En el Certámen literario para conmemorar el CCLXIVaniversario del inmortal Cervantes que celebró el LiceoArtístico Literario de Manila el 23 de abril de 1880, seconcedió como premio á la mejor de las composicionesen prosa, una sortija con un camafeo que lleva el busto deCervantes.
Al referirse al resultado obtenido en el certámen abiertopara este aniversario y después de señalar que sehabían presentado 14 pliegos, de los cuales fueronrechazados todos menos los que llevaban los números 1 y 12,dice el Jurado: «Leídos ambos trabajos, los quesuscriben no han vacilado en la adjudicación del premio,atendida la superioridad de la alegoría marcada con elnúmero 12», y después de hacer un estracto deltrabajo el Consejo de los dioses, cuyo lema era Con elrecuerdo del pasado entro en el porvenir, se expresaasí: «Como se vé, la idea y el argumento de laobrita son de gran originalidad, á lo que debeañadirse la circunstancia de brillar en toda ella un estilocorrecto hasta lo sumo, una admirable riqueza de detalles,delicadeza de pensamientos y figuras y, por fin, un sabor tanhelénico que figura el lector encontrarse saboreandoalgún delicioso pasage de Homero, que con tanta frecuencianos describe en sus obras las Olímpicassesiones.—Tantas y tan preciadas cualidades han pesado en elánimo de los que suscriben para, sin discusión, nivacilación siquiera, preferir este trabajo al marcado con elnúmero 1.[1]»
.
JÚPITER sentado en el trono de oro y piedras preciosas yllevando en la mano el cetro de ciprés, tiene á suspiés al águila, cuyo plumaje de acero refleja mildiversos colores: los rayos, sus terribles armas yacen en el suelo.A su derecha está su esposa, la celosa JUNO, con refulgentediadema, y el vanidoso pavo real. A su izquierda la sábiaPALAS (MINERVA), hija y consejera, adornada de su casco y terribleégida, ciñendo el verde olivo y sosteniendogallardamente su pesada lanza. Formando severo contrasteestá SATURNO, acurrucado y mirando desde léjos tanhermoso grupo. En gracioso desórden hállanse lahermosa VENUS, recostada en un lecho de rosas, coronada de olorosomirto, y acariciando al AMOR; el divino APOLO, que pulsablandamente su lira de oro y nacar y jugando con las ocho MUSAS...